El Camino Mozárabe es una ruta que forma parte del conjunto de Caminos de Santiago que siguieron los peregrinos procedentes del antiguo territorio de Al-Ándalus en la Edad Media, siendo una de las numerosas rutas secundarias que se extienden por toda la península. Se denomina de esta forma a los caminos que se inician en Málaga, Granada, Jaén y Córdoba, y que conectan con la Vía de la Plata en Extremadura.
Una ruta de gran importancia en época musulmana por haber sido una de las vías de comunicación más relevantes de Al-Ándalus entre las principales ciudades del interior. No obstante, cuando los territorios de Al-Ándalus fueron ocupados por los cristianos, estas rutas siguieron siendo importantes, pero no igual que antes. No fue hasta hace relativamente poco que han sido recuperadas por organizaciones jacobeas de Andalucía, con el apoyo de instituciones locales y regionales. Sin embargo, su crecimiento ha sido muy significativo, siendo una de las rutas secundarias más importantes.
¿Por qué se llama Camino Mozárabe?
Durante la Edad Media, buena parte de la península estuvo ocupada por el pueblo musulmán. Sin embargo, cuando los cristianos que vivían en la zona descubrieron la tumba del Apóstol Santiago, decidieron preservar su fe y peregrinar hasta Santiago de Compostela. Esos cristianos recibían el nombre de mozárabes, por lo que el camino fue bautizado de esta manera.
¿Cómo es el Camino Mozárabe?
La duración del Camino Mozárabe no cumple con el promedio de 25 kilómetros por etapa que suele ser habitual en las rutas jacobeas. Especialmente, cabe destacar la ruta desde Málaga que cuenta con varias etapas por debajo de los 15 km. Con lo cual, los peregrinos que estén más en forma incluso pueden hacer dos etapas en un mismo día para acortar la ruta.
En cuanto al grado de dificultad, lo cierto es que no entraña mucha complicación, pues la mayor parte de las colinas son suaves y transita principalmente por caminos de tierra. Eso sí, hay que tener en cuenta que en verano puede ser una experiencia bastante dura e incluso arriesgada debido a las altas temperaturas. Con lo cual, lo ideal es hacer la ruta en primavera u otoño.
Los paisajes que la caracterizan son principalmente campos de olivo que ofrecen unas vistas preciosas, aunque a partir de Granada, el paisaje cambia.
¿Qué ver durante el Camino Mozárabe?
Las localidades que recorren el Camino Mozárabe son en su mayoría rurales, por lo que no cuentan con mucha población. Pero es precisamente esto lo que les confiere mucho encanto. No obstante, en caso de que tengas tiempo para dedicar un día extra a visitar algún lugar, te recomendamos que le dediques mayor tiempo a las capitales provinciales, como Almería, Jaén, Córdoba, Málaga y Granada.
La Alhambra de Granada
Sin duda, la Alhambra de Granada es el monumento más importante que se puede ver a lo largo del Camino Mozárabe. No en vano, es el segundo monumento más visitado de España, solamente por detrás de la Sagrada Familia de Barcelona. Una verdadera joya de época musulmana que destaca por su impresionante conjunto de jardines, palacios y una fortaleza que albergaba una ciudadela en tiempos de Al-Ándalus.
La Mezquita-Catedral de Córdoba
Construida en tiempos de Emirato de Córdoba, la Mezquita es el monumento más importante de Córdoba. Posteriormente, cuando la zona cayó bajo el dominio de los cristianos, se le concedió la cualidad de catedral cristiana. Sin duda, vale la pena dedicar unas horas para admirar su belleza y descubrir el importante papel que ha jugado a lo largo de la historia de la ciudad.
La Alcazaba de Málaga
La Alcazaba de Málaga es un palacio fortaleza de época árabe que se ubica en la zona del centro de Málaga a los pies del monte Gibralfaro, donde se encuentra además el castillo árabe al que se encontraba conectado a través de un pasillo protegido por murallas. Pero también tendrás la oportunidad de ver el Teatro romano y el edificio de la Aduana, lo que supone la unión de las culturas romana, árabe y renacentista en un mismo lugar.
En definitiva, es probable que, de todos los caminos que llevan a Santiago de Compostela, el Camino Mozárabe sea el menos conocido, pero no por ello menos bello e interesante. Una ruta por lugares poco transitados por los caminantes, con una amplia variedad de matices religiosos, históricos y etnológicos. Una sorprendente combinación de comunidades que ofrecen contrastes únicos y una impresionante riqueza cultural y patrimonial. Una forma distintas de llegar a Santiago, sin prisas y sin urgencias.
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